Consigna: escribir un cuento de no más de 200 palabras desde dentro de una computadora.
-¡Dale, anímate hombre! Pruébame. Estás utilizando sólo el veinte por ciento de mi capacidad. No haces más que pensar y pensar y no te decides a dejar todo en mis manos. Dame algunas pautas nomás, lo demás corre por mi cuenta. ¿Quieres escribir un cuento? ¿Y la consigna soy yo? Me haces reír. Es tan simple y tú lo ves tan complicado. Ese es el problema de los hombres: la falta de entrega.
-Ensayemos: “Estoy cansada de esperarte, de escuchar tus lamentos sostenidos sobre tu falta de creatividad, de amor, de emociones, de ideas. Si supieras lo fácil que es. Con sólo decírmelo, te quiero, y ya está. No sabes de lo que soy capaz; si te atrevieras. Recorreríamos juntos el mundo y viviríamos las más divertidas aventuras. Yo contengo todo lo que tú deseas. ¿No crees que yo pueda amarte de esta manera absoluta, sin condicionamientos, sin prejuicios, así tal como eres? Pruébame, aquí estaré siempre; aunque me canse de tus indecisiones, no me iré, salvo que tú decidas dejarme. De ti depende. ¡Vamos hombre, atrévete!”
¿Viste qué fácil fue? Yo te escribí el cuento y tú te llevas las palmas. ¿Ahora comprendes la medida de mi amor?
3 comentarios:
Excelente Georgi! Te felicito. Me conmueve que sepan distinguirlos.
Bravo!
Un abarazobesogrande (todo junto para que se sienta más)
Vivi
Hola Vivi! Tanto tiempo!
Qué alegría verte por acá.
Gracias por tu comentario y te mando otro abrazobesogrande también para vos.
Geor
Buenisimos Geor...mas vale tarde que nunca no!!!!Ja ja ja...
Felicitaciones!!!!!
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